Isaías 64:1-4
Dios creó al hombre para que dependiera totalmente de Él, y Su plan es que cada día anhelemos más y más de Su presencia, de Su bendición, de Su misericordia y Su abundancia en cada necesidad o en cada embate del enemigo.
Nuestro Padre celestial no quiere que nos conformemos con el maná de cada día, sino que vayamos por más; y para ejercitarnos en este principio permitirá que atravesemos, precariedades y aflicciones, pero siempre dispuesto a responder nuestro clamor y suplir nuestras necesidades según sus riquezas en gloria.